La recia formación que se alcanzó en esas escuelas todavía tiene particular influencia en el mundo político dominicano. Muchos altos funcionarios y ejecutivos de hoy pasaron por esas escuelas. Sin embargo, con el tiempo, estas escuelas languidecieron y los partidos políticos las dejaron perecer. Hoy esas fuerzas políticas se enfrentan a la falta de una generación de relevo y a un liderazgo difuso.
La Fuerza Nacional Progresista, que preside el doctor Marino Vinicio Castillo Rodríguez, dió respuesta a esta situación y acaba de inaugurar, en el pasado fin de semana, en El Pozo, San Francisco de Macorís, una escuela de formación política. Le ha dado el nombre de Ramón Cáceres a este centro de formación.
Con este paso el doctor Castillo Rodríguez comienza a cubrir un importantísimo campo para la formación de los dirigentes políticos de su organización, orientados dentro de principios políticos propios. Es el primer paso para lograr una militancia política con ideología plena. Es una escuela de futuro.
Asimismo, al escoger el nombre de Ramón Cáceres para esta escuela, la Fuerza Nacional Progresista, alienta un aspecto importante de nuestra vida política. La figura de Mon Cáceres está vinculada a los ideales de progreso social.
Fue uno de los involucrados en la eliminación de la dictadura de Ulises Heureaux (Lilís) en 1899 y, cuando alcanzó la Presidencia de la República, aplicó programas de educación en diferentes aspectos, estableció programas para el desarrollo de infraestructuras para fomentar la producción y mejorar las condiciones de vida. .
Mon siempre dijo que quería ser el último presidente machetero. Por todo lo que involucra, esta escuela de formación política merece nuestra felicitación y alentamos a los demás partidos a recrear las que ya tenían y han abandonado.
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