jueves, 30 de julio de 2009

Guía para la acción (14)

Por Pelegrín Castillo Semán
30 de Jul 2009 12:00 AM

1. Cuando existe auge económico, bonanza, crecimiento, los pueblos son muy tolerantes con las faltas y corruptelas de sus gobernantes. En cambio, cuando sobrevienen periodos de penurias, crisis, decrecimiento no perdonan ni las menores “indelicadezas”, que paradójicamente son las que más irritan al ciudadano común.

2. Cuando un influyente personaje de la corte de Luis XVI pretendía regalar un collar a la Reina Austriaca –que tenía un enorme tesoro de collares- no se imaginaba que provocaría una colosal tormenta política. La falta de austeridad y de prudencia, así como el desbordamiento de las ambiciones de los que mandan, en tiempos de crisis, pueden sublevar el ánimo popular.

3. La corrupción no es solo un problema moral o institucional. Puede llegar a convertirse en un serio problema de seguridad nacional. Con la corrupción se tornan más vulnerables las fronteras marítimas, aéreas y terrestres, el registro civil y electoral, los recursos naturales en áreas protegidas, el carácter nacional de los mercados laborales, los límites prudenciales del endeudamiento público, la efectividad de la propiedad privada y pública…

4. San Jerónimo proclamó: ¡La fuerza de los bárbaros está en nuestros vicios! Cuando describía la causa de lo que sería la caída de Roma. - ¿Puede una nación debilitada por la mala política- con sus secuelas de corrupción, imprevisión e irracionalidad- soportar grandes presiones y peligros externos?-

5. La opinión pública crítica y acerba. Los medios de comunicación denunciantes y contestatarios. Las instituciones inconformes y exigentes. Todas son actitudes necesarias, imprescindibles para reducir o por lo menos contener la corrupción pública y privada. Si como reacción, se reestructura el equipo de gobierno y se dan algunos escarmientos, mucho mejor. Pero, mientras los raseros fundamentales de la sociedad aprecien a las personas por lo que tienen y no por lo que son no se avanzará en firme. No olvidemos que la verdadera conducta íntegra depende menos del temor al castigo que de la lealtad a valores superiores.

6.Puntos a considerar en una agenda anticorrupción: Revisar el endeudamiento público externo e interno, centralizar por rubros las adquisiciones de bienes y servicios del sector público para aprovechar su poder de compra, emplear las técnicas de prefabricado en las edificaciones públicas, con un modelo multiuso, establecer una política de mantenimiento de equipos y edificaciones, asegurar los bienes públicos, establecer un registro transparente de las propiedades públicas y unos mecanismos idóneos para su valoración y traspaso. Establecer límites estrictos sobre regalos permitidos.
Pelegrín Castillo Semán es diputado FNP

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