En la resolución, los diputados Pelegrín Castillo (FNP-DN) y José Ricardo Taveras Blanco (FNP-Santiago) solicitarán instruir a la banca privada y a la Superintendencia de Bancos a crear mecanismos sencillos y rápidos para la ejecución de los contratos de factoring.
También incentivar a través del Banco de Reservas a que se inicie la aplicación de esta figura financiera comenzando por crear un catastro de las distintas empresas, de las cuales el banco esté dispuesto a adquirir facturas por cobrar de sus suplidores.
“El factoring agropecuario es un producto financiero que los bancos ofrecen a las personas consistente en contrato a través del cual un comerciante o productor cede a una empresa da factoraje (banco), sus derechos sobre créditos a cambio de que la sociedad de factoraje se los abone anticipadamente, pero deduciendo de este una comisión”, explicó David Matías, presidente de la FNP en Constanza, quien está vinculado al sector agropecuario.
Explicó que el factoring es atractivo para los productores o comerciantes agropecuarios que venden a grandes empresas con elevados niveles de solvencia crediticia, satisfaciendo así sus necesidades de capital circulante. En los considerandos de la pieza se consigna que “la producción agropecuaria juega un papel en la alimentación de los pueblos”.
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