Palabras de honor

El presidente Leonel Fernández inició ayer un nuevo período constitucional en la Presidencia de la República. En su discurso ante la Asamblea Nacional luego de juramentarse, el mandatario se comprometió a realizar una serie de obras que, de materializarse, significarán un empuje considerable para la infraestructura del país.

Los acueductos, represas, carreteras y centros regionales universitarios anunciados, entre otras obras, constituyen proyectos prioritarios para el progreso de los dominicanos, en los que vale la pena invertir recursos del tesoro nacional.

El reelecto gobernante también anunció que buscará socios en el sector privado para construir una segunda línea del Metro de Santo Domingo y un tren de carga y pasajeros para cubrir la ruta Haina-Santiago. Esperamos que el mandatario tenga la suerte de encontrar esos socios y que el país y los usuarios de esos medios de transporte no tengan que pagar un precio oneroso para su operación y utilización.

Pero el anuncio más importante y concreto del Presidente Fernández ayer fue que dará un efectivo apoyo a la producción agropecuaria al flexibilizar, aunque sea transitoriamente, las normas para facilitar el financiamiento a la agricultura y a la ganadería. Esa decisión, que esperamos se materialice sin ninguna dilación, significará la garantía para que en un momento que el mundo se estremece por la carestía y la disminución de alimentos básicos, los dominicanos dispongamos de productos esenciales para el abastecimiento interno y ñsi se logran excedentes- poder vender en países que los están demandando.

LISTÍN DIARIO ha sido reiterativo en demandar junto a las voces más altas de los productores, el empresariado, la banca privada, los partidos políticos y la Iglesia Católica- un impulso y apoyo decisivo a la agropecuaria nacional, porque estamos convencidos de que en ella está la garantía de que nuestros niños, envejecientes, trabajadores, estudiantes, amas de casa, soldados y profesionales, no tendrán que sufrir el riesgo y las consecuencias de una hambruna masiva o pagar el costo insoportable de adquirir alimentos que eventualmente lleguen desde otras naciones.

En su tercer período de gobierno, deseamos al Presidente Fernández mucho éxito y buena suerte para que pueda cumplir con todas sus promesas, que no son anuncios de un candidato que busca atraer el voto de los más ingenuos, sino el compromiso de un presidente que ha sido reelecto. Son y deben ser palabras de honor, que el jefe del Estado debe trabajar para plasmar en hechos tangibles.

Buena suerte, Presidente Fernández, y que Dios le ayude a hacer un gobierno digno de imitar y recordar por las presentes y futuras generaciones.

Editorial Listín Diario 8/17/2008