El
país tampoco ha logrado quitar el polvo del espejo para mirar lo que le
sucedió a su vecino Haití, cuyas entrañas económicas y humanas fueron
estremecidas por el terremoto del 12 de enero de 2010, del cual no han
logrado recuperarse en lo más mínimo.
La Asociación Dominicana de Mitigación de Desastres (ADMD), en su página web, establece que La Hispaniola pertenece a una región geológica activa con un substancial peligro de terremotos, destacando que de acuerda a la historia e información registrada, la isla ha sido estremecida en varias ocasiones por terremotos destructivos. Establece que han pasado 64 años desde que se registró el último terremoto destructivo en Republica Dominicana. La Sociedad Dominicana de Sismología e Ingeniería Sísmica también se ha expresado en este sentido y su preocupación es por el alto nivel de riesgo sísmico que tiene el país. La entidad ha llamado la atención porque los gobiernos no han acogido las sugerencias de reforzar escuelas, hospitales y otros edificios públicos. Sus directivos dicen, además, que no ha servido de aprendizaje para las autoridades el espejo terrible que significó el fuerte sismo de Haití en enero de 2010. El vicepresidente ejecutivo de la Cámara Dominicana de Aseguradores y Reaseguradores (Cadoar), Miguel Villamán, y el diputado Pelegrín Castillo coinciden en la necesidad de incentivar una cultura de protección estratégica ante desastres naturales. “Como aseguradores siempre le hemos expresado nuestra preocupación al Estado dominicano sobre el tema de no asegurar las propiedades públicas, tales como puentes, hospitales, escuelas, carreteras, túneles, Metro de Santo Domingo y otras infraestructuras que son vitales”, explicó Villamán. El ejecutivo y experto del sector seguros señaló que a pesar de la importancia y la conciencia que hay en el país, aún el Estado no tiene asegurada la mayoría de las obras públicas. Villamán indicó que en varias oportunidades los aseguradores se han acercado a las autoridades, principalmente al Congreso Nacional, para que se encamine un proyecto en este sentido. Dijo que una ventaja que ofrece el seguro es que transparenta el costo de las obras frente a los aseguradores internacionales. Identifica como ventaja que el Estado invertiría en la gerencia de los riesgos que implican los fenómenos naturales, incluyendo los sismos, ya que cuando ocurren catástrofes hay que erogar del presupuesto una cantidad de recursos que por lo general no están dispuestas o reservadas para eso, lo cual sería más cómodo con una póliza que cubra eventuales daños. El diputado Pelegrín Castillo promueve un proyecto a favor de ordenar una política de reforzamiento de estructuras públicas. Explicó que el proyecto está dirigido a ordenar a las infraestructuras importantes, tales como hospitales, escuelas, ministerios, ayuntamientos, carreteras y otras, porque lo primero que se debe evitar es la ocurrencia de daños catastróficos. El diputado señaló que la ley prevé la identificación de los fondos para impulsar esa política de reforzamiento, pero también se alienta al sector privado a hacerlo. “Hay toda una tecnología y procedimiento para reforzar edificaciones ante un sismo de mayor envergadura”, dijo Castillo. Destacó que junto a esa política de reforzar las estructuras públicas se ordena un proceso de aseguramiento de las obras, ya que República Dominicana no tiene aseguradas sus grandes infraestructuras con una póliza que responda ante una eventualidad. “Es algo muy elemental que un Estado dedique una parte de sus recursos a asegurar lo que es el capital físico del país, aunque sean las estructuras más importantes desde el punto de vista estratégico ante la posibilidad de que ocurran fenómenos telúricos o ciclones que puedan afectarlas”, sostuvo. El diputado Castillo afirmó que la implementación de una medida como esta a través de un proyecto de ley sería una previsión que ayudaría mucho ante cualquier hecho de esta magnitud. Indicó que la ley ordena muchos otros aspectos, pero que estos son algunos de los más importantes. LA ÚNICA PÓLIZA DE LA QUE DISPONE EL PAÍS Miguel Villamán, en su condición de ejecutivo de Cadoar, aclaró que el Estado dominicano contrató una cobertura de ciclón y terremoto, pero que funciona de manera diferente al seguro tradicional, sino que es una póliza paramétrico, donde la cobertura, en este caso US$100 millones, es dividida en partes iguales en caso de huracanes y terremotos. Sin embargo, especificó el pago por daños dependerá de la intensidad que tenga el desastre natural (ciclón o terremoto) y que ese evento pueda pasar por zonas de alta o baja densidad de población. La póliza está suscrita por Seguros BanReservas. “Se trata de un préstamo con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) por US$24 millones para una póliza que cubre un período de cinco años. El beneficiario es exclusivamente el Estado dominicano a través del Ministerio de Hacienda”, explicó. Explicó que la intención del seguro es cubrir parte de los gastos que deba hacer el Estado en caso de un terremoto y ciclón. Aclaró que la póliza no cubre una obra en específica. Listindiario. |
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