Tengo razones de peso para felicitar al gobierno y la creo justa, después de tantas criticas más que ácidas, emitidas por sectores opuestos con frecuencia a todo, y ni hablar del Proyecto de la Cumbre y el Metro. El PRD decide no participar en dicha Cumbre, cuando para muchos era un espacio político que debieron aprovechar, donde podían plantear sus mejores ideas aunque no fueran aprobadas, pero el país tenia la oportunidad de sopesar y tomar notas de las ideas buenas y las negativas. La política es eso, en el fondo, vender ideas.
Felicitar a los organizadores de dicha Cumbre, porque han sido más que numerosos los sectores que la están siguiendo y las ideas planteadas. muchas señaladas por el gobierno, y debemos comprender que no todo se puede realizar, porque tenemos que ajustarnos al presupuesto del año, para no desbordar la ley fundamental que sostiene la estructura del Estado.
También felicitar, al equipo económico oficial por lograr que nuestro Banco Central reduzca los intereses de los préstamos con promesas de seguir bajándose y ya la banca comercial ha comenzado a abrir puertas que se necesitan para financiamientos a distintos niveles en este momento como nunca, para desarrollar producciones y vadear la crisis Global que nos desafía. También, felicitar la inauguración del Metro con una llegada casi milagrosa, oí decir a alguien cuando lo probé el lunes pasado. ¡Qué diferencia!
Era un el caos lo que teníamos con el transporte que traumatizaba aquel espectáculo sacando pasajeros de los carros porque utilizaban líneas supuestamente de ciertos grupos sindicales. Me recordaban a los comunistas perseguidos antes, y ni hablar de cómo manejan esas guaguas y carros públicos destartalados, dando la impresión de que no es para cargar personas, es sálvense quien pueda. Ahora bajan el pasaje después del Metro. A propósito, había montado Metros, pero quiero felicitar también a Diandino Peña y su equipo.
Creí que estaba en Francia cuando monté dicho Metro, el país del idioma para el romance, que perfuma los Campo Elíseos y sus monumentos que inspiraron el genio de Napoleón Bonaparte, tanto con su espada como su pluma; los derechos del hombre, y tanto más. ¡Cuánto nos ha enseñado Francia! Pero me impresionó el Metro nuestro; me pareció extraordinaria su limpieza, aunque se trate de escoba nueva, su fina atención del personal a todos los niveles; sus colores que simbolizan nuestros signos patrios. Con razón ya el candidato panameño que nos visitó, Ricardo Martinelli, dijo que se inspirará en esa obra, y hemos tenido otros visitantes atraídos por lo mismo.
Esta obra me recuerda aquellas avenidas tan útiles de Balaguer, como la Luperón, Abraham Lincoln, Bolívar, 27 de Febrero, y otras bordeando el país, así como las Presas, el Faro a Colón y el Acuario, que me decía un ingeniero que se ha pagado docenas de veces y todavía vemos decenas de guaguas trayendo visitantes del interior.
Quiero también felicitar al experimentado ingeniero Leandro Guzmán, con quien coincido el jueves en El Nacional sosteniendo los dos el mismo criterio sin acuerdo previo para resolver el problema eléctrico con el proyecto que habíamos sometido al ingeniero Temístocles Montás, recomendando los recursos que tenemos, así como las fuentes alternativas al petróleo, como la solar, la eólica y hasta la atómica. Me satisfizo más, porque nosotros, ese día, recordamos el proyecto que sometí al coordinador de la Cumbre, ingeniero Montás, para ayudar a resolver el problema eléctrico.
Felicitar finalmente a los perredeistas que se motivaron con la Cumbre demostrando que vale más tarde que nunca, y apoyaré siempre a todo lo que beneficie nuestro país y terminé diciendo el jueves que el Presidente debía volcar su voluntad en la tarea de resolver el problema eléctrico para que las futuras generaciones lo vean como el Padre de la Autosuficiencia Energética. No quiero terminar sin manifestar mi solidaridad y condolencia a la familia del fallecido gran amigo, George Arzeno Brugal, cabeza de una gran empresa, un hombre que dio apoyo a las mejores causas en beneficio del país y especialmente de los pobres. Paz a sus restos.
http://www.elnacional.com.do/opiniones/2009/2/12/7414/Voy-a-felicitar-es-justo
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