El diputado por la Fuerza Nacional Progresista (FNP), Pelegrìn Castillo, advirtiò que hay que tener mucho cuidado frente al problema haitiano debido a que las grandes potencias tratan de buscar la unificaciòn de la isla.
Castillo hizo los pronuciamientos en momentos en que el tambièn diputado del gobernante Partido de la Liberaciòn Dominicana, Manuel Jimènez, sometiò un proyecto de resoluciòn en el que se declara el 12 de Enero el dìa de la solidaridad del pueblo dominicano hacia Haitì.
Segùn Castillo, la aprobaciòn de ese proyecto resultarìa muy peligroso porque hay fuerzas internas y externas que empujan a lograr la unificaciòn de las dos naciones.
Recordò que Haitì es un estado fallido muhco antes de que se registrara el terremoto del 12 de Enero del año pasado, donde murieron màs de 220 mil personas.
Castillo dijo que las grandes potencias se han olvidado de Haitì en cuanto a la ayuda prometida despuès del desastre, situaciòn que es reconocida por los propios haitianos.
Indicò que los dominicanos no deben perder de vista el respeto a la soberanìa de la Repùblica Dominicana, y que las fuerzas externas propician una unificacion con Haiti.
Asegurò que los dominicanos han demostrado ser solidarios con Haitì, pero que es preciso entender que es la comunidad internacional es que debe ayudar a resolver los problemas haiatianos.
http://periodismoverdadero.blogspot.com/2010/12/pelegrin-castillo-advierte-sobre-caso.html
1 comentario:
Con todo el respeto que merece la hidalguía y honestidad patriótica de nuestro candidato presidencial, Pelegrín Castillo, necesito repetir, que si un hermano o vecino menor temporalmente autista no recibe la ayuda requerida de sus “padres” y “tíos” ascentrales, al vecino más cercano no le queda más remedio, por caridad y solidaridad humanas,-que tenderle la mano rápidamente para evitar que termine de hundirse, se hiera a sí mismo o a nosotros mismos.
Tarde o temprano habrá que entender que, a los únicos países que pueblan a este mismo y territorio insular sino que también estamos en la misma mirilla telescópica que nos enfoca inexorablemente.
Si nadie quiere ayudar suficientemente a Haiti, como parece ser, somos los dominicanos quienes tenemos que compartir el pan y el agua y la inteligencia con que Dios nos ha bendecido, para transferirle nuestros conocimientos, experiencias vividas, agua, semillas y tecnologia necesarias para: reforestar su territorio con plantas útiles y/o comestibles de rápido crecimiento y rebrote, para suplir madera, proteínas hortalizas de aprovechamiento inmediato asi como los necesarios y urgentes servicios médicos que el caso requiere para poder evitar la exterminación que amenaza a tanto a ellos como a nosotros por igual.
Con ese Plan Mínimo, con la ayuda externa de la Caridad Internacional y con la ayuda espiritual y material que siempre hemos tenido para salir ilesos de toda amenaza, HAITI RENACERA y nosotros seremos, de ahí en adelante, sus hermanos más amados para el resto de la vida de ambas naciones.
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