El Consejo Nacional de la Magistratura

El Consejo tendrá la trascendental tarea de elegir los jueces de la SCJ

Escrito por: RODOLFO MESA CHÁVEZ

Dejando de lado la rebatiña política, propia de las pasadas elecciones congresuales y municipales. Es de suma importancia que la sociedad civil organizada, la iglesia católica y las demás iglesias y los medios de comunicación pongan sus ojos y toda su atención en la futura conformación y puesta en funcionamiento del Consejo Nacional de la Magistratura, la cual tendrá la importante y trascendental tarea de seleccionar de 7 jueces de la Suprema Corte de Justicia, 13 jueces del tribunal constitucional y 5 jueces del Tribunal Superior Electoral y evaluar el desempeño de todos los jueces de la Suprema Corte de Justicia.

De acuerdo con el artículo 178 de la Carta Magna, el Consejo Nacional de la Magistratura estará integrado por: El Presidente de la República; el Presidente del Senado; Un senador (ra) del partido que ostente la segunda mayoría; el Presidente de la Cámara de Diputados, un diputado (a) del partido que ostente la segunda mayoría; el Presidente de la Suprema Corte de Justicia, un magistrado escogido de la Suprema Corte de Justicia, escogido por ésta y el Procurador General de la República. Se puede apreciar que de los 8 miembros que lo integran, 5 pertenecen al partido de gobierno y a sus aliados, uno al PRD y los dos restantes serán jueces de la Suprema Corte. De lo cual resulta evidente la influencia y preponderancia que tendrá el doctor Leonel Fernández en el Consejo Nacional de la Magistratura y, en consecuencia, en la Suprema Corte de Justicia, el Tribunal Constitucional y el Tribunal Electoral.

Debemos recordar que en el año 1997, siendo Presidente el doctor Leonel Fernández y estando éste en franca minoría en el Consejo Nacional de la Magistratura, se procedió a la conformación de la actual Suprema Corte de Justicia, bajo un procedimiento diáfano y transparente, en el cual primó como criterio de escogencia las capacidades profesionales y éticas de los candidatos y no las ascendencia y filiaciones políticas partidarias. En aquella ocasión el Presidente recibió los elogios y respeto de la sociedad, ya que propició un proceso en el cual toda la población, a través de la televisión, fue testigo en tiempo real de cómo era estructurado el Poder Judicial. Esperemos que ahora, con un control absoluto del poder legislativo, el Presidente de la República, al frente del Poder Ejecutivo sea lo suficientemente sensato e inteligente para garantizar que en el Poder Judicial prime la neutralidad y la capacidad técnica y profesional. La sociedad dominicana lo exige, y le asiste ese derecho.

http://67.199.16.148/opiniones/2010/5/31/327964/El-Consejo-Nacional-de-la-Magistratura