Pelegrín Castillo aboga por implementación proyecto nación más allá de intereses políticos

Pelegrín Castillo conversa con Persio Maldonado

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El diputado de la Fuerza Nacional Progresista (FNP), y aspirante a la nominación presidencial por esa organización, licenciado Pelregrín Castillo, abogó este miércoles por la implementación en el país de un proyecto de nación, que produzca una revolución en todos los órdenes en la sociedad dominicana. El legislador, quien giró una visita de cortesía al director de El Nuevo Diario, licenciado Persio Maldonado, significó que ese proyecto nacional, si queremos transformarnos en una sociedad moderna, tendría que desarrollarse más allá de los intereses políticos partidistas. Manifestó que por medio de las organizaciones políticas esas metas serían difíciles de materializarse, pero que esto se lograría con la voluntad libérrima de los integrantes de la sociedad dominicana.

Expresó que el proyecto de nación por el que aboga debe estar encaminado principalmente al impulso de la producción agropecuaria, creando las condiciones necesarias para que los productores se sientan motivados a permanecer en las áreas rurales y que sus actividades resulten rentables y competitivas.

Precisó que el proyecto de nación por el que aboga está sustentado en el rescate total de la nación, incluyendo como es necesario de los valores morales que han desaparecido de la familia dominicana.

Con respecto a su proyecto político, dijo que desde jovencito sus padres les enseñaron la importancia que tenía el campo y la producción agropecuaria, como herramienta valiosa para el desarrollo nacional, significando que si logra alcanzar el poder sus primeros esfuerzos estarían encaminados al rescate de la producción agropecuaria.

Durante su visita al director de El Nuevo Diario, Castillo, delineó su proyecto político y dijo que en el país existe un gran segmento de la sociedad que no apoya la presente administración, pero que tampoco desea regresar a los tiempos conocidos, obviamente refiriéndose a la administración del PRD 2000-2004, que encabezó el ingeniero Hipólito Mejía, precisando que en esa gran proporción de dominicanos y dominicanas es que nosotros confiamos que se involucraría en la conformación de un nuevo proyecto de nación que beneficiaría al país.

“No es posible hablar de seguridad alimentaria si no fortalecemos el campo dominicano para que se implementen un modelo productivo que beneficie a los actores que contribuyen producción de alimentos en cantidades industriales que den para satisfacer la demanda local y para exportar los excedentes produzcan las divisas necesarias para adquirir los bienes de consumo que no se producen en el país”, acotó Castillo.

Precisó que, por ejemplo, que da lástima observar como en muchas zonas que producían importantes rubros agrícolas como café, cacao, caña de azúcar, hoy lucen abandonados, debido a que los campesinos salieron de estos lugares o porque desaparecieron los incentivos que antes motivaron a esos productores a permanecer en sus predios.

Narró que una gran proporción de los dominicanos que abandonaron el campo y hoy viven en las urbes de las principales ciudades del país, cuando se produzca un cambio rotundo en el campo dominicano volverán a su terruño, y se integrarán a la producción.

Durante la entrevista el dirigente de la FNP reconoció que es cierto que en los últimos años la economía dominicana ha crecido, pero que ese crecimiento necesariamente no ha podido acabar con la pobreza, destacando que aún persisten grandes diferenciales sociales.

Reiteró que para que avanzar significativamente en el modelo productivo tenemos que necesariamente poner en práctica una verdadera reconversión del sector agropecuario, que debe incluir un programa general de construcción de las redes de caminos vecinales en todo el país, que contribuirá a que el campo en última instancia se desarrolle, para que de esta manera se pueda lograr que los productos agropecuarios lleguen rápidamente a los centros de acopios sin dificultades ni contratiempos.

Propone, asimismo, que se conforme una especie de facturación de la producción a fin de que el total de esta pueda ser adquirida por los supermercados y el comercio organizado, y que a través de esa estructura se realicen las transacciones comerciales y se honren los compromisos que los productores tengan con las entidades financieras, debido a que una acción en ese camino, también disminuiría la intermediación comercial, facilitando que los productores reciban mejores precios por sus cosechas, y, que por consiguiente, los productos lleguen al consumidor final a precios más justos.

En otro orden de ideas, dijo que en el proyecto ha concebido, debería implementarse una marca de austeridad en el gasto público del Estado, significando que entiende que no deberían existir en el Estado 10 oficinas de compras y contrataciones públicas, es decir que estas deben reducirse y concentrarse en por lo menos cinco, dependiendo de las áreas principales.

Dijo, que por ejemplo, debería existir una en lo que respecta a compras de combustibles, equipos de defensa, de medicamentos, y que estas estén avaladas en licitaciones públicas ajustadas a los procedimientos existentes en la materia.

Con respecto al comercio internacional, Castillo abogó por una modificación del DR-CAFTA, significando que cuando se realizaron las negociaciones con los Estados Unidos y los países centroamericanos, el país no pudo negociar ese convenio con márgenes favorables al país, lo que contribuyó a que los productores nacionales salieran altamente perjudicados, debido a que esa ocasión la administración de Mejía estaba dedicada básicamente a su proyecto reeleccionista, y quería presentarle al electorado algún logro de su gobierno.

Al delinear lo que sería su proyecto en el aspecto de la política energética, el dirigente de la FNP, Castillo destacó que primero habría que analizar la ley minera, especialmente en lo que tiene que ver con las concesiones existentes en estos momentos, así como reducir las mismas a por lo menos tres empresas.

En ese sentido, apuntó que de acuerdo a estudios realizados por varias firmas reconocidas en el país existen yacimientos mineros, especialmente de petróleo y gas en diferentes puntos del país, a saber: en las zonas sur y este del país en cantidades comercialmente explotables, significando que en estos pueden mencionarse los existentes en Maleno, Azua y también en la denominada zona de San Pedro, que va desde Hato Mayor hasta la provincia de El Seibo, y más allá en la provincia La Altagracia, en la comunidad de Sanate, municipio de Higuey.

http://elnuevodiario.com.do/app/article.aspx?id=235791