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Al candidato Maldonado no lo salva ni Chechere. Uno puede analizar el actual proceso electoral y sus tendencias desde cualquier ángulo y puede colegir fácilmente que todo se decidirá en la primera vuelta, mucho a poco, a favor de Leonel Fernández. O dicho en lenguaje llano, peso a morisqueta.
¿Por qué? Porque todos los factores externos ( los internos como la gran crisis económica-bancaria (2003-2004), los bonos soberanos y la hiper-corrupción que generó el desastre de gobierno de Hipólito y el PRD ya fueron conjurados y hoy por hoy el país exhibe una economía sana y en crecimiento en medio de la crisis mundial: una verdadera proeza regional catalogada, incluso, de milagro por organismos internacionales) aunque parezcan adversos favorecen al Presidente por su capacidad, confiabilidad y visión global. Veamos: alzas mundial en los precios del petróleo, alzas y escasez mundial de alimentos, cuasi recesión de la economía norteamericana, turbulencia en la economía mundial, agudización de los fenómenos atmosféricos (calentamiento global del planeta, contaminación ambiental, escasez de agua, etc.) convulsiones políticas y sociales en América del Sur, en fin, un cuadro mundial aterrador sólo apto para lideres capaces, visionarios y auténticos. El presidente Leonel Fernández, sin duda alguna, es uno de ellos.
Entonces, ante ese panorama, la pregunta que debemos hacernos es: ¿Cuál de los candidatos actuales podría conjurar con mejores aciertos semejante situación? ¿Cuál de ellos, ve la actual situación de crisis mundial como una oportunidad de encarar nuevos retos y poner a prueba el ingenio y la capacidad creadora del pueblo y su futuro presidente?: Maldonado. Imposible. Amable. ¡Que paso! No estamos hablando de gallinas ni de salamis. Ellos (Maldonado y Amable) solo llegan, en situaciones como estas (De excepción), a poner galletitas en el horno, si acaso. En otras palabras, ¡no están a la altura de estas circunstancias!
Por ello, el candidato Leonel Fernández es el único entre los aspirantes con las credenciales, el aval y la experiencia necesaria para encarar el presente cuadro mundial. No hay otro. Dígame usted, ¿cuál? Si de Maldonado y Amable rápidamente podemos hacer una radiografía: el primero tiró en su gobierno unas barrillas e hizo grandes negocios (…) y el segundo, con la Liga hace triza. ¿Qué les parece?
Por otro lado, el país no puede caer en las mismas manos que hace poco (apenas cuatro años) lo devastó y casi lo desapareció. Porque, como olvidar aquella pesadilla. Como olvidar aquel desastre de gobierno (2000-2004). Como olvidar a Hipólito, el PPH y al Súper-ministro Maldonado. Pero todavía peor, como olvidar al escuadrón económico de la muerte y sus bonos soberanos: Andy-Escuder-MartínezMoya-Malkum (economistas tipo pirañas: ¡atacan en manadas!). ¡Dios nos libre!
Y por último, como olvidar un presidente (Hipólito) y sus ministros (entre ellos, Maldonado) que se mofaban de la gente con ocurrencias y chabacanerías muchas impublicables, mientras, la población se caía a pedazos. Entonces, estos no son tiempos para “roba la gallina” ni mucho menos para candidatos hechos a retazos, a la carrera y por correspondencia. Por eso, lo puedo jurar: a Maldonado, no lo salva ni Chechere. Su derrota es inminente y, lo mejor, por nocaut en el primer asalto. Por malo, por pésimo y porque no hicieron nada. ¡Absolutamente nada!
Autor: Fco. S. Cruz
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