sábado, 7 de agosto de 2010

Debilidades turísticas en el Este

Hoy/ Wilson Morfe

En La Romana se ha consolidado un turismo de mayor selectividad

Escrito por: Fabio R. Herrera-Miniño
El pasado día 24 planteaba las debilidades del turismo en la zona de Puerto Plata, que contra viento y marea sobrevive gracias a las agallas de los empresarios y su fe en el negocio, pese a tantas adversidades, en donde se destaca la lentitud de los gobiernos para ponerle la debida atención a tantas deficiencias, que ha llevado ese destino turístico casi al borde del colapso.

En el extremo oriental de la isla, el litoral de Punta Cana-Bávaro-Macao constituye el centro del poder del turismo nacional, asimilando más del 60% de las habitaciones hotelera. Existe una dinámica población periférica que vive del turismo, ya sea sirviendo a los hoteles, trabajando en su construcción u ofertando los bienes y servicios que exige la calidad de la oferta turística de la zona.

Como consecuencia de esa población, sirviendo y sirviéndose del turismo, se ha desarrollado un desorganizado proceso de expansión urbana, que sin mucha coherencia ha desbordado los tímidos esfuerzos de las autoridades para controlarla o mínimamente organizarla. Tal es el caso de Verón, que con su hacinamiento, en particular por la presencia masiva de extranjeros, constituye un motivo de preocupación para la seguridad y calidad de los servicios de los resorts de Bávaro, Cortecito y Arena Gorda.

El desarrollo del turismo hacia Punta Cana y Cap Cana presenta otros matices de mayor control, ya que esos ghetos humanos de trabajadores, como los de Verón, no se registran más allá del sur de la entrada al aeropuerto internacional, con una buena oferta de viviendas para los que trabajan en los resorts o negocios relacionados al servicio de esos complejos hoteleros.

Algo se ha intentado hacer con Pueblo Bávaro, para atraer a los que por su nivel de ingresos, rehuían mezclarse con un explosivo crecimiento urbano, donde se carece de casi todos los servicios, sin un trazado regular de calles y definición de áreas, lo cual podría perjudicar en parte a lo que se ha logrado en la región.
La construcción de la autopista del Coral, así como la proyectada prolongación del Bulevar desde Punta Cana hasta Miches serán ingredientes muy poderosos para ampliar las ofertas, atrayendo a más gentes a establecerse, con su mano de obra o sus negocios de las más diversas índoles, que serán nuevas oportunidades afianzadores del polo turístico.

Las autoridades no deben limitarse a proporcionar la calidad de nuevas vías de comunicación o de nuevos abastecimientos de agua potable o de plantas de tratamiento de aguas negras, sino que ya es necesario una acción que frene la arrabalización existente, que gravita, como espada de Damocles, en el éxito ascendente del turismo en la región oriental, al cual se le añadirá lo que se llevará a cabo en Miches.

La zona de La Romana presenta otras características, en donde la presencia dinámica y desarrollista del Central Romana, ha consolidado un tipo de turismo de mayor selectividad. Este al fin ha logrado que la ciudad cabecera de la provincia, deje de ser un gran batey, se espabile de su timidez desarrollista ya que todavía a finales de la década del 90 tenía rasgos de poco impulso en consonancia con lo que se llevaba a cabo en Casa de Campo y Bayahíbe.

http://67.199.16.148/opiniones/2010/8/6/337010/Debilidades-turisticas-en-el-Este

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