“La cuestión es que la democracia es necesaria, pero tiene que enriquecerse, porque no la podemos dar por cristalizada con el logro de las libertades públicas”, agregó.
Insistió en que se hace imprescindible su transformación para que produzca las condiciones en que desaparezcan las desigualdades y la pobreza en América Latina.
El líder reformista habló al dejar inaugurado el encuentro de cooperación e Intercambio de experiencias entre los líderes de bancadas parlamentarias de las organizaciones que integran la Unión de Partidos de Latinoamérica (UPLA) que se celebra en esta ciudad con la participación de representantes de más de veinte países.
Entre los participantes en el seminario figuran el presidente de la UPLA, el senador chileno Jovino Novoa Vásquez; y ex mandatario salvadoreño Armando Calderón Sol, así como el presidente de la Cámara de Diputados, Julio César Valentín; el senador Francisco Domínguez Brito y los diputados Pelegrin Castillo y José Ricardo Taveras.
Morales Troncoso explicó que de 30 años de continuidad democrática en el Continente, y 43 en la República Dominicana, “parecería lógico que nos diéramos por satisfechos sobre la salud de la democracia”.
“Habernos convertido en un hemisferio de democracias, nos hizo considerar que finalmente a América Latina le había llegado la hora en que la libertad, el progreso y el bienestar pasarían rápidamente de la esperanza a la realidad.
Morales Troncoso dijo que las “primeras bregas” de las democracias en los países latinoamericanos estuvieron vinculadas a los procesos electorales que le daban origen a su institucionalización, “a que los mismos se celebraran periódicamente, fueran competitivos y que el voto fuera universal y libre”.
Agregó que luego vino el énfasis en el crecimiento económico, en creación de riquezas y en la promoción de las inversiones, así como en hacer que el Estado fuera fiscalmente sostenible.
Igualmente –agregó- se creó el andamiaje jurídico que garantizara el estado de derecho y que estableciera guías y diera seguridades a los emprendimientos económicos.
El presidente del PRSC explicó que esos logros llegaron junto con nuevos desafíos, que se presentaron en la forma de cambios dramáticos en la composición de la población, “en un crecimiento de las desigualdades económicos y en el surgimiento de tensiones sociales generadas por el descontento”.
“El ejercicio de la libertad es consustancial a la existencia de un régimen democrático, pero viene aparejado con muchas responsabilidades, fundamentalmente la responsabilidad de tomar el destino en nuestras manos y la responsabilidad de convertirnos en verdaderos ciudadanos”, expresó finalmente.
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