El PRD y las pérdidas

Luis Encarnación Pimentel
encar-medios@hotmail.com

Con la insostenible denuncia de fraude y la temeraria amenaza de tirar a la gente a protestar a las calles, el PRD –pero especialmente la dirección partidaria– terminaría perdiendo lo más por lo menos o perdiendo dos veces.

Al no encontrar los escarceos blancos el eco buscado en sectores sensatos e influyentes del país y aumentar cada vez la presunción de que la estrategia sólo buscaría justificar la derrota electoral haciendo ruido afuera para distraer adentro a los “compañeros”, lo primero que los autores han estado perdiendo es la guerra de la opinión pública.

Claro, con las naturales excepciones de voces afines a los intereses del partido del jacho que, enquistadas en algunos medios y haciendo de “comentaristas” y “comunicadores” siendo dirigentes y hasta candidatos a posiciones electivas, lucen desesperados y desbordados al hablar, penosamente sin que sus dueños le hagan un llamado, por lo menos, a la cordura y al respeto. De continuar las cosas por ese derrotero –y ya se vió que hasta comendó a la dirección tocar la puerta institucional que corresponde, que es la de la JCE– partido y dirigentes terminarán quedándose solos en sus reclamos.

Parte de lo equivocada de la estrategia empleada, en principio por el ingeniero Miguel Vargas y luego por perdidosos dirigentes que han estado llevando cartas y quejas a embajadas y organismos internacionales, fue el hablar y acusar de fraude en vez de irregularidades, que se ha podido comprobar que éstas últimas estuvieron presentes en distintos partidos, denunciándose incluso que algunos candidatos fueron víctimas de acciones de compañeros de su propia organización.

Siendo así, una denuncia alegre e irresponsable de fraude que pretenda envolver a la JCE y a sus jueces, como se ha tratado en algún momento, lo primero es que descalifica a quien la hace, pero también le hace un flaco servicio al sistema y al organismo electoral, que tanto terreno en materia de avance institucional y rescate de la credibilidad han ganado con el actual equipo.

Al parecer, el PRD y su cúpula no se prepararon para perder, pese a que todas las encuestas serias decían por donde soplaba la brisa y cómo terminarían los números.

¿Fueron los únicos sorprendidos Miguel y los suyos, no así Hipólito, Guido ni muchos otros?

http://www3.listindiario.net/puntos-de-vista/2010/5/29/143976/El-PRD-y-las-perdidas