Otra vez el Presidente Leonel Fernández dejó boquiabierta a la oposición impugnadora y a su jauría mediática, que sólo alcanzaron a balbucear tres sandeces: que “es mentira” que el gasto corriente sea uno de los bajos de Latinoamérica y que “no cumple lo que promete” y que “el discurso fue el mismo del año 2008”, lo último fruto “agudeza mental” que al quedar desarmada de argumentos y aturdida, ya no niegan la capacidad discursiva-dialéctica del Presidente y su visión al día del quehacer mundial, sino que recurre a descalificarlo “porque no fue una rendición de cuentas”. ¡Dios mío, cuanta pequeñez!
Yo oí de boca del Presidente a cuánto ascendió el déficit fiscal, el gasto en la factura petrolera; cuál fue el nivel de inversión extranjera, cuántos turistas visitaron el país, cuántos U$$ fueron las remesas, que pasó con las zonas francas y lo que se hará en este año, cuántos fueron los subsidios y la cantidad de dinero gastados en ellos, cuántos los pasajeros se del Metro; Conaleche le darán no 10 sino 20 millones mensuales, cuánto se va a invertir en minería, cuánto se le dio a la Falconbridge y a los empresarios de ZF para que no cancelen a los operarios; oí cuántos dominicanos reciben la Tarjeta Solidaridad, cuántos reciben atención médica en el régimen contributivo y el subsidiado del Senasa; oí cuántos hospitales se terminarán y los 4,500 millones más para Educación, e igual monto a la salud; oí cuánto menos fue que el año pasado para fecha; cuánto prestó el BagrÏcola y lo que hará este año; oí de liquidez los bancos, de cuánto fue la inflación (4.7%) y cuánto creció la economía (5.5%); yo oí de cuatro barcazas de la CDEEE y la conversión en gas natural de la Cogentrix, lo de la segunda línea del Metro, de alfabetización, desayuno escolar, los elevados, carreteras, calles y autopistas, en construcción y a construir; oí sobre terminar el comedor, el Instituto de Cáncer Heriberto Pieter y otras obras de la UASD aquí y en el interior (¡y el Rector de la UASD ni aplaudió, en lo que Tulio H. Arvelo llama “el espíritu de partido”!)
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Oí las comisiones formadas y que se harán por decreto para impulsar las exportaciones, la agropecuaria, la ecología, las fuentes hídricas, los problemas fronterizos, los ayuntamientos y hospitales comunitarios: yo oí porqué hay que integrar más tierras a la producción para librarnos de alimentos importados; oí de de un ingenio que usará sólo bambú, de las medidas que tomadas por el BC para que no caer en otra crisis bancaria (que por cierto, somos de los pocos países no arrastrado a ella); yo oí de la construcción de 20 mil nuevas viviendas para los pobres, aparte los proyectos que serán inaugurados, cuantas bombillas se reparten gratis y al paso que va la Autopista Eléctrica Santiago-Capital; oí de la construcción hoteles y resorts por 12 mil millones de dólares solicitados por los inversores; oí que se inaugurará un Centro Cultural en V. Juana y oí todo lo que hizo y hará Educación Superior y el Indotel, lo de Petro-Caribe; oí que se ampliará Solidaridad, Senasa y terminación del súper hospital de Villa Mella con más de mil camas; oí que no quedará un solo anciano desprotegido, los acueductos terminados y en curso y la titulaciÚn de las propiedades y lo que hacer IAD; oí cómo ha influido la bancarrota internacional en el país (que en EEUU va por U$$3 billones y 2.5 millones de desempleados; China, 20 millones sin empleos y Europa ha gastado 1.7 billones inyectando a los bancos y que Japón se cayó, a.u.); oí un voz de un “honorable legislador” (así dijo el Presidente) que interrumpió el acto solemne de la AN; lo del “gasto corriente” en Brasil (11%) y Costa Rica (4%), dicho frente a sus embajadores y ninguno lo ha desmentido (como pusieron a decir al MVP Ito Bisonó, dizque que aquí era un 80%).
¡Demuéstrenlo, con Martínez Moya, embustero visceral que pasó por Industria y Comercio y Refidomsa con muchas penas y ninguna gloria!
Constitución y democracia
Yo oí los nombres de los que participaron en el proyecto de reforma constitucional y a los sectores que consultaron, además, las discusiones que faltan en el Congreso; también, que es la reforma más completa, humanista e igualitaria, cuyo fin es erradicar el abuso de poder, la arbitrariedades y los robos; oí el Plan de Seguridad Democrática, sus frutos y que será reforzado; oí sobre la amplia red de las relaciones exteriores que cubre todos los continentes buscando nichos mercados y el intercambio con esos países; oí de los comités provinciales y municipales para que las comunidades participen de los gobiernos locales comunidades sepan lo que hacen con lo que reciben; de las facilidades que está dando y dará el BNV y de los más de 70 mil millones de los trabajadores en el Sipen que, con leyes especiales, podrían usarse en casas de trabajadores y en la producción con regreso y ganancias asegurados (¿qué opinará V República?); oí sobre la unificación de las elecciones, del fortalecimiento del Ministerio Público y la Justicia y la profilaxis de las lacras que por décadas vienen ensuciando con sus acciones delincuenciales el uniforme militar y policial (una vez la PN tuvo que eliminar, no me acuerdo la Jefatura, el Departamento de Tránsito porque “picaban más que un bracero haitiano”, según la frase luminosa de José Labourt); oí que seguirá la construcción de cárceles modelos y se ubicará a los “palomos” in situ (su barrio) para ser reeducados; cero tolerancia con los narcos, lavado y delincuencia violenta o no.
¡Todo eso yo lo oí! Sólo falta ahora que los “sabios” de la ‘revolución de saliva’, si llegan, hagan una rendición y gobierno mejores. Y el pueblo, ¡qué resbale, para que se lo lleve el Diablazo!
http://www.listin.com.do/app/article.aspx?id=92913
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