El crecimiento del producto bruto interno (PBI) de un 1.3 por ciento a un 8.5, da una importante connotación a las consecuencias de un clima de estabilidad y confianza |
Por César Nicolás Penson / El Caribe |
Lunes 5 de mayo del 2008 actualizado a las 1:59 AM El pasado 30 de abril el doctor Leonel Fernández, atendiendo a una invitación de la Cámara Americana de Comercio en su ciclo de presencias de los candidatos presidenciales, expuso en tan apropiado escenario éxitos del gobierno que preside en los ámbitos económico y social. Los aspectos de la cautivante exposición se basaron en comparativos de cómo se encontraba la economía al momento de asumir el control del gobierno y el Estado en que a la fecha presenta ese importante pilar del devenir nacional. La primicia de que el crecimiento de la economía en el primer trimestre del año ha sido de 6.1% es un auspicioso anuncio, a la vez que un reconocimiento de que las políticas aplicadas para manejarla así como las medidas tomadas para mantenerla en el rumbo correcto, son directrices de un buen timonel de la nave nacional. El mantenimiento de la estabilidad macroeconómica y de la tasa de cambio, da confianza de que la combinación de efectos que ocasionan permiten augurar posibilidades de mitigar las derivaciones económicas de la grave dificultad externa que nos acecha: crisis en EU, caída del dólar, petróleo y alimentos. No bastan cifras ni ejercicios académicos para medir los beneficios a la sociedad toda, pero el anuncio de que en su gobierno se han creado cerca de 480,000 nuevos empleos, sitúa la tasa de desempleo en 14.5% en contraste con la encontrada en el 2004 que superó el 19%. Formas prácticas de enfrentar la pobreza que arropa a una buena parte de los dominicanos, que más allá de la retórica o las promesas, son realidades. La disminución de la inflación, que tiene la virtud de “comerse” los recursos, bajó de un 28.7% a un 8.8%. El crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) de un 1.3% a un 8.5, da una importante connotación a las consecuencias de un clima de estabilidad y confianza. El poner al país en el mapa de los destinos de capitales es un importante logro. La puesta en marcha del Seguro Familiar de Salud, a pesar de brutales escollos y resistencias, es un beneficio importante para la salud social dominicana. Un millón de afiliados significa un trascendente provecho para los de menor ingreso por la desprotección endémica a que han estado sometidos. Su plan de gobierno estaría basado en mantenimiento y dinamización de la economía, promoción del empleo y el clima laboral, así como la suscripción de un pacto social y preservación del medio ambiente, y da muestra de que sabe cómo hacerlo. “La pelota ‘ta muy caliente pa entrale a mano pelá”, y menos con aprendices de gobernantes. César Nicolás Penson Paulús es empresario http://www.elcaribecdn.com |
martes, 6 de mayo de 2008
Escenario apropiado y buenas cifras
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